Este finde, Ana (mi compañera de apartamento por unas semanas) y yo, nos hemos plantado con nuestras mochilitas en Lyon. Llegamos allí el sábado por la mañana y nos quedamos hasta el lunes por la noche.
Resumiré en pocas líneas lo mejor:
1. Subir a la noria en la place Bellecoeur para obtener una perspectiva general. Y para cagarnos de miedo porque iba muy rápido, era muy grande,y estaba abierta. Hay un video demostrativo pero es demasiado humillante. Lo dejo para nuestros más íntimos.
2. La casa museo de los hermanos Lumière, unos de los -varios- inventores del cine. Menuda pedazo de choza art noveau se marcaban los señores. Entre otras cosas, pudimos ver todos los cacharritos que usaban para filmar, así como sus películas, o peliculitas, como decía mi profesora de Cine de la facultad, jiji.
3. El albergue donde nos hospedamos. Por 17 euros teníamos habitación con baño (compartida, en total seis personas, claro),vistas increibles de Lyon, desayuno bastante bueno incluido, y el chavo de la recepción que por iniciativa de Ana se llamaría «Diego Rumbeando» (Razón aquí http://www.youtube.com/watch?v=9wL7ji4A6Qo), y que estaba re-que-te-bue-no. Al principio nos cayó un poco tonto, pero luego ganó puntos. También hicimos unos amigos mejicanos la mar de majos, y unas enemigas inglesas, las dos que dormían en nuestra habitación.
Pero es normal que nos odiasen un poco, ya que la primera noche, monté un numerito sonámbulo digno de manicomio. Al parecer, tras estar gritando durante un rato tanto en español como en francés: ¿QUÉ PASA; QUÉ PASA???!!! me tiré de la litera (no, no sabemos cómo, pero he sobrevivido). Lo siguiente fue subir apresuradamente a oscuras las escaleritas que iban hacia el mini altillo donde las inglesas dormían plácidamente, no se con qué intención,y nunca lo sabremos, ya que mi querida prima tuvo el detalle de despertarme: Pilar, ¿qué haces? para así evitar una guerra del almohadas o un nuevo conflicto anglo-español. Entonces yo me desperté repentinamente, y avergonzada dije: NADA; NADA. Para volver a mi cama actos seguido, como si NADA hubiera pasado.
El hindú que vigilaba el albergue el domingo por la noche, me declaró su amor en medio de la cocina. Ana dijo, es porque tienes rasgos hindúes. Yo sólo se que cenar al ritmo de las canciones de bollybood, los primeros cinco minutos es gracioso, luego ya cansa.
4. Lo fácil que era colarse en el metro de nuestra parada y en el tranvía.
5. La frase del finde: Que no se note que somos españolas ( y que acto seguido yo la cagara para que todo el mundo se diera cuenta de dónde veníamos)
6. Las rebajas del centro comercial Part Dieu:Adidas, gap, Roxy,regalitos de cumple para mi hermano…
7. Comer de bocatas todos los días, como Dios. 2 euros al día de gasto en comidas. No hay nada como comprarte un pan integral de 2 kilos, un jamón serrano de parma que no tiene nada que envidiar el español: Sentarnos en la parada del tranvía de turno, sacar el cuchillo, cortar el pan,y ale, bon appetit, ante el desconcierto general de la gente alrededor.
8. …para luego gastarnos 6 euros en merendar como Dios manda un pedazo de crêpe en un café del maravilloso Vieux Lyon.
9. ¡¡Hacer un amigo!!! ¡¡un amigo francés!!!! ¡¡¡Tenemos un amigo francés!!! Se llama Michel y me va a enseñar a hacer snowboard (un día de estos…)
10. Salir de «mini-fiesta» (por lo sosa que era la fiesta,y por lo pronto que nos fuimos a dormir, ya se sabe, los horarios franceses) a una bareto 60s, con una soirèe mod, donde las únicas que bailaban eran las djs modettes y … las españolas. Y lo buenos que estaban los chavales... no dábamos abasto. EN general, en Lyon, había muy buen material.
11. Lyon, una ciudad para disfrutar desde las alturas: desde las alturas de la colina de Fourviere (o algo así), desde las alturas de nuestro albergue (bendita cuesta que había que subir. Todavía recuerdo a Ana diciendo: esto nos va a dejar el culo para cascar nueces!!), desde las colinas del barrio de la Croix Rouge, desde lo alto de la noria …
6 febrero , 2009 at 12:05 am
me ha encantado el resumen «didáctico-práctico» de vuestro viaje. A ver si pronto Ana escribe algunas líneas y nos aclara qué es eso de que vas de sonámbula por las noches asustando a las desabridas inglesas!
Un besote para ambas
6 febrero , 2009 at 8:26 am
Lyon… tengo una deuda pendiente con esa ciudad. Algún día la saldaré, y de paso aumentaré si cabe un poco más el nivel de buenorros :D
6 febrero , 2009 at 8:38 am
Lo del jamón de Parma iba en en serio? O es que cuando hay hambre no hay pan duro. Sois geniales.
6 febrero , 2009 at 9:40 am
Pois si que o pasastes ben, que bonita a foto dende as alturas. Asi que hai bo material non? voume ter que deixar caer por alí jeje
6 febrero , 2009 at 10:12 am
Si, si, lo de jamon de parma por mi parte va en serio, por la de Ana hay diferencias. Por mi parte ese jamon de parma que tengo en la nevera no tiene nada que envidiar a un buen jamón español.
jeje
7 febrero , 2009 at 7:08 pm
sé que no viene a cuento, pero que guapa estas con flequillo por dior!
Un beso
11 febrero , 2009 at 8:36 am
Pero que bien que te lo montas!!!! ;D que buena pinta tiene ese viaje!!!!!!!!!!!!!!!
13 febrero , 2009 at 3:28 pm
Me encanta eso de comer bocadillos de jamón todo el día todos los días… es exactamente lo que suelo comer yo cuando estoy de vacaciones ya que 1. normalmente no hay dinero para comprar algo más (a ver… quizás ahora que cobro sí… pero como me he ido acostumbrando, durante años, a viajar de esta manera, no me sale fácil desacostumbrarme) y 2. no hay tiempo para pararse con las cosas que ver.
Yo también tengo huéspedes, Pili: mi hermano y su novia, que me han robado mi camona, y sus dos amigos!
Beso.
Cuándo te vemos de nuevo por barna?